¿Está usted seguro que es libre? La gente piensa que porque viven en América o porque no están en prisión son “libres”. Hablemos sobre esto un poco más. ¿La libertad significa que usted puede hacer lo que quiera? ¿Es un prisionero menos libre que alguien que vive en el “mundo real” debido a las restricciones que se le han impuesto? Permítame contender que hay mucho más influencias limitantes fuera de la prisión que dentro de ella. Para empezar todo está en cómo alguien ve la situación.
Cuando realmente empiezas a pensar acerca de ello, en definitiva, que es la libertad? ¿Eres libre si la gente te puede hacer daño? ¿Eres libre si estas sumergido en deuda hasta
las orejas? ¿Eres realmente libre con todas las presiones sociales, religiosas y económicas que están sobre ti todos los días? La libertad es algo que todos anhelamos pero que solo algunos encuentran en su vida. Entonces ¿cómo obtenemos la verdadera libertad? Antes de compartir lo que yo pienso es la respuesta a esa pregunta, me gustaría compartir un poco de mi experiencia personal respecto a este tema de la verdadera libertad.
De alguna forma, y de una manera muy real, un prisionero “tras las rejas” tiene más libertad y tiene ventajas sobre el que aparentemente tiene la libertad en el mundo real. He servido al Padre desde las alturas de un floreciente ministerio internacional alcanzando a millones de personas alrededor del planeta en más de 8 lenguajes, y ahora tengo la oportunidad de servirle a El desde una posición muy inferior, perdiendo todo en el camino. ¿Perdí mi libertad o más bien la gané? Y si estamos supuestos a compararnos a la vida de Yeshua, déjame hacerte esta pregunta: “¿Yeshua perdió su libertad cuando fue crucificado o más bien El ganó su libertad? ¿Qué es la libertad realmente? ¿Cómo es la libertad?
Dentro de este centro penitenciario y de los campos de entrenamiento, tengo más tiempo para orar, estudiar, contemplar, meditar, calcular y desarrollar una relación más íntima con Yeshua de lo que yo podía hacer en un “ministerio a tiempo completo”. Cuando era “libre” para hacer lo que yo quería, la vida era lo que me decía que hacer y el poco tiempo que tenía para relaciones y para las cosas que son más importantes en la vida, las que realmente importan. Y la verdadera libertad viene cuando alimentas una real comunión con Cristo; un proceso que toma mucho tiempo.
Amigos, la verdadera libertad no es seguir un montón de reglas, marcar cosas en una lista religiosa, o aun remover las tradiciones o doctrinas de hombres de nuestras vidas. La gente religiosa siempre está buscando hacer algo PARA Dios, y mientras tanto el Creador está buscando gente que haga algo CON EL. El no necesita nada, incluyendo la adoración. El quiere una relación!
La VERDADERA libertad es cuando ves a tu Padre Creador a los ojos y sabes que la verdadera razón por la que estas respirando es por Su gran amor hacia ti. La verdadera libertad comienza con comprender que El es amor y es ese amor que emana a través de El que nos da mandamientos a seguir. El principio de esos mandamientos es el amor. El final de esos mandamientos es amor. El punto central de que El nos da los mandamientos no es para hacerlo a EL feliz, porque El ya es completo en El mismo.
El objetivo de llevarnos a través de Sus decretos es producir amor en nosotros. El VERDADERO amor. Donde la mayoría hace las cosas por una obligación religiosa y ofrendas superficiales, mientras ofenden a su prójimo, juzgan a su hermano, condenan a las personas con diferente color de piel o creencia, el Padre está buscando esos que tienen el corazón de El. El está buscando por esos que comprenden que para caminar sobre el agua, uno debe primero tener la fe de salir de la barca. Y salir de la barca significa que uno tiene que ignorar las limitaciones que la mente y la sociedad le ponen al individuo, y tener fe en Aquel que es, y que no tiene límites.
Ser libre es rehusarse a permitir que el mundo te defina, te juzgue o que te de elogios. Si, aun un elogio puede causar el deseo carnal de desear más elogios, lo cual te pone en una esclavitud para que actúes por un aplauso. Libertad es actuar para una audiencia de Uno. Libertad es confiar en Su Palabra, Su manera y Sus promesas. Libertad es tomar tiempo cada día y decir: “Mi Padre es importante para mí y no me dejare esclavizar al punto que me robe mi tiempo con El” Si la verdadera libertad es definida como estar libre de este cuerpo carnal y terrenal y sentarnos en la presencia del Rey por toda la eternidad, entonces ¿no podríamos decir que el que se toma el tiempo para estar en Su presencia ahora es el que realmente es libre? ¿Quién es el que realmente está en prisión? ¿Qué es la libertad realmente? Si es verdad que aquel que el Hijo libertare, será libre verdaderamente, entonces ¿cuándo viviremos esa libertad donde la podamos sentir?
La libertad no es un lugar, un país o el ejercicio de tu propia voluntad. La libertad no es poder hacer lo que tú quieras. La verdadera libertad es estar tan cerca de El que sabes lo que El quiere que hagas en cada situación, removiendo las limitaciones que te influencian en este mundo y todos los críticos que vienen con ello. Yahweh no tiene límites y entre más tiempo pases con El, más libre serás.
Shalom,
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